Casajús Quirós, Concha2018-07-052018-07-052014index l comunicación | nº 4 (1) | 2014 | Páginas 209-235 | ISSN: 2174-18592174-1859http://hdl.handle.net/10115/15395A lo largo de las últimas décadas y, sobre todo a partir de la digitalización, el diaporama ha multiplicado su presencia: aparece en los informativos televisivos, en los documentales, en el propio cine, en las salas de exposiciones y museos, en concursos de vídeo-arte, en instalaciones, espectáculos teatrales y musicales. Para la civilización del espectáculo se ha convertido en una herramienta útil e imprescindible al servicio de la información, de la comunicación, de la ciencia y la tecnología, de la expansión de la cultura y del arte. Los programas multimedia han abierto la posibilidad de que ‘cualquiera’ que maneje un ordenador se convierta en realizador de diaporamas. Estos pueden ser muy sencillos o muy complejos, y su calidad variable. La cantidad puede excluir la creatividad al tiempo que impulsa su evolución y desarrollo. Este artículo pretende reflexionar sobre los rasgos que conforman su identidad, en qué se diferencian de la imagen cinética, lo que aportan a la imagen estática y al mundo del arte, siendo también interesante indagar en su sentido, su validez y preguntarse de dónde viene su gran fuerza y su relación con el mundo de la creación.spaAtribución 4.0 Internacionalhttp://creativecommons.org/licenses/by/4.0/diaporamaArtedigitalizaciónImágenes silentes. La reinvención del diaporama como fórmula fotográficainfo:eu-repo/semantics/articleinfo:eu-repo/semantics/openAccess6203.08 Fotografía5801.01 Medios Audiovisuales6111.01 Creatividad