BAILAR FUERA DEL BAILE

Abstract

En las primeras décadas del siglo XX, la danza experimentó una transformación radical al alejarse de las convenciones del Ballet Clásico. Este cambio originó un nuevo concepto, la danza contemporánea. La disciplina de la danza desborda sus antiguos límites y se enriquece y amplía su campo de acción con sus incursiones en el arte, la arquitectura o la política. Ese desbordamiento lo es también en el sentido literal del término, en cuanto a que se rebasan los límites de los espacios que tradicionalmente le estaban asignados para hacerse presente en otros ámbitos de la sociedad. El tema de análisis propuesto para el desarrollo del Trabajo de Fin de Grado relaciona este cambio revolucionario, con una interacción mayor entre la danza y la arquitectura. Destacando la relación sinérgica entre ambas disciplinas, considerando cómo la estructura arquitectónica y la disposición de los objetos influyen en la creación de movimientos y secuencias coreográficas. Esta convergencia crea nuevos espacios: más dinámicos, inclusivos y significativos. Los nuevos ámbitos no sólo son funcionales, sino también expresivos y culturalmente más relevantes. El objetivo se centra en analizar al detalle cómo los espacios urbanos son utilizados para la expresión coreográfica a pesar de que su diseño, propiamente dicho, no sea creado para tal fin. La arquitectura y la danza pueden ser utilizadas como formas de expresión de alto nivel. La danza, al igual que la arquitectura, es arte y comunicación. En su totalidad, ambas disciplinas constituyen una manifestación de ideas, emociones, sentimientos, reivindicaciones, entre otros aspectos. La danza al utilizar el espacio público como escenario, convierte estos lugares en espacios sociales y políticos, donde se desafían las normas establecidas y se reivindican nuevas formas de interacción y convivencia. Esto subraya el valor de la danza como medio para mejorar la sociedad, promoviendo la inclusión y la expresión libre de ideas, emociones y reivindicaciones. En última instancia, se trata de profundizar en el binomio Danza y Arquitectura, promoviendo una visión holística de la unión entre el arte, el espacio y, en último caso, de la sociedad en su conjunto; reconociendo el potencial transformador de estas disciplinas en la vida diaria.