El personaje femenino en el espacio dramático del Siglo de Oro

Abstract

En el teatro del Siglo de Oro español dos personajes podían convivir en el mismo sujeto dramático, el personaje femenino y el masculino, dos identidades que se solapaban entre sí, para crea un efecto complejo y novedoso. A diferencia del teatro Isabelino en el que solo los hombres podían interpretar papeles femeninos, en España, a partir del Siglo XVI, se permitió a las mujeres subir al escenario para interpretar papeles de género. En 1556, en "La Comedia de los engañados" de Lope de Rueda, encontramos de forma primigenia el recurso del disfraz en el teatro, también lo utilizará Cervantes en algunas de sus comedias. En La casa de los celos, por ejemplo, vemos al personaje de Marfisa caracterizada de amazona y armada como un soldado. Durante el XVII hubo muchos periodos de prohibiciones y de forma intermitente hubo leyes que frenaron este tipo de representaciones que cuestionaban los códigos morales que exigía la iglesia.